Hola, ¿qué tal estás? ¿las cosas te han ido bien? Seguro que sí. Seguro que eres feliz. O al menos eso espero. Te escribo esta carta para decirte que te echo de menos, que me faltas desde hace demasiado tiempo y hoy por hoy, lo he notado. Te escribo esta carta para darte algunos consejos. Son sinceros y surgen de la experiencia, no espero que los sigas, pero me gustaría que los tuvieses en cuenta. ¿Me dejas? ¿Si? Allá voy.
Por favor, no llores tu primer día de clase, las cosas no son tan malas como imaginas. Entra con una sonrisa que conquiste a todos y que nunca puedan olvidar, ya entenderás por qué. Aprovecha al máximo desde el primer momento y elige bien a las personas que te van a acompañar en tu día a día. Estudia siempre que sea necesario, es aburrido lo sé, pero con el tiempo lo agradecerás. Saca buenas notas y llegarás lejos, pero nunca cambies los libros por la diversión. Atento a lo que te digo: JUEGA. JUEGA MUCHÍSIMO. Llega a casa cansado de haber estado con tus amigos. Juega al fútbol, al escondite, al pilla-pilla, salta a la comba o cualquier otra cosa. Pero hazlo. Aprovecha ahora que puedes. Ensúciate las manos y rompe la rodilla de los pantalones ahora que te da igual. Luego empezaras a tener más cuidado. Que no te asuste darle mal al balón o engancharte con la cuerda, mas adelante entenderás que hay peores fracasos en la vida. No dejes de hacer algo porque puedan reírse de ti, es posible que sea la única época en la que puedas hacerlo.
Cuando llegue tu último día de colegio agárrate fuerte a tus mejores amigos y no los sueltes. Tarde o temprano acabarás perdiéndolos, pero procura que sea lo más tarde posible. Pese a que ocurran muchas cosas que no entiendas, no desistas y haz que las cosas salgan como tu quieres y te evitarás malos tragos. Confía en ti y en todas esas personas y seguro que te irá mucho mejor.
Se bueno con mamá y aunque a veces sea pesada, hazle caso. Ya tendrás tiempo de elegir tu mismo. Dile que la quieres de vez en cuando y escucha sus consejos, pues sólo lo hace para educarte bien. Lo agradecerás. Aprovecha de meterte en su cama cuando sientas miedo y corre a abrazarla cuando te encuentres mal y tengas ganas de llorar. Créeme, luego te costará mas. A papá admiralo y haz que se sienta especial. Pídele que sea él quién te enseñe a montar en bici o a tirarte de cabeza en la piscina porque luego sentirá que ha invertido el tiempo que no trabajaba estando contigo. Aprovéchalo ahora que no sois tan diferentes.¡Ah! Y no lo utilices como un monedero, guardatelo para más adelante cuando sera realmente importante. Con tus hermanos mantén una buena relación y pídeles ayuda cuando lo necesites, pero sobre todo procura que a medida que vayas creciendo eso siga siendo así.
No desperdicies ninguno de tus talentos. Aprende a tocar algún instrumento de música, practica algún deporte o cualquier otra cosa que se te de bien. No pienses que es una pérdida de tiempo, con el paso de los años pensarás que fuiste tonto por no haberlo hecho. También te pido que disfrutes de las películas infantiles porque sinceramente son lo mejor. Que juegues con muñecos y te inventes historias imposibles. Que hagas muchas pero que muchas trastadas, porque cuando crezcas, lo que hagas tendrá consecuencias mas importantes. Así que aprovecha. Pero sobre todo, te pido que no tengas prisa por crecer, que disfrutes al máximo de tu infancia, porque luego no vuelve. Que nadie te la quite.
Ya te he dicho que no pretendo que me hagas caso, es más: NO ME HAGAS CASO. Lo mejor de ser niño es precisamente el hecho de que no debes preocuparte por nada. Vive esta etapa como tu quieras, como un niño, porque solo así se consigue que sea una de las mejores épocas de la vida.
Un saludo muy grande y tarde o temprano nos encontraremos. Atentamente : Tu "yo de mayor"
PD: Ni se te ocurra comerte lo guisantes, no lo hago ni yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario